Armar rompecabezas puede parecer un trabajo arduo e intimidante, especialmente cuando ves que algunos amantes de los rompecabezas experimentados sufren y se dan topes contra la mesa. Lo que probablemente no has considerado es que esos rompecabezas suelen tener miles de piezas y diseños muy complejos, pensados especialmente para desafiar a los expertos. Pero no te dejes llevar. Si te estás iniciando en este increíble mundo, nosotros te damos algunos tips para que superes con éxito los fascinantes desafíos que las piezas te imponen.
1.- Busca con quién armar tu rompecabezas.
Sabemos que, para muchas personas, armar un rompecabezas en solitario puede ser una actividad terapéutica, como dar largas caminatas por el parque. Sin embargo, nosotros creemos que armar rompecabezas es mejor en familia o con los amigos. Planea tu fin de semana y cita a los que más quieres en la sala de tu casa. Con un objetivo común, crearán vínculos más estrechos entre ustedes, al tiempo de que se divertirán ejercitando su memoria. También, un rompecabezas es buen motivo para iniciar una charla profunda.
2.- Elijan uno.
Si nunca has armado un rompecabezas, elige uno de pocas piezas. Uno de 100 o 200 podría ser adecuado para que empieces en solitario. Pero si juntaste a tu familia y tampoco están habituados a armar, uno de 500 piezas es perfecto. Elijan un diseño que les guste a todos. Hay de todo tipo de temas: desde el reino animal hasta obras de arte clásico. Sólo es cuestión de ponerse de acuerdo.
3.- Distribuyan tareas.
Antes de comenzar a ensamblar las piezas, identifiquen las secciones del rompecabezas guiándose por la caja y decidan quién buscará y armará qué. Pueden proceder armando secciones, figuras o las orillas. Ustedes elijan el procedimiento que más crean conveniente. Eso dependerá de su destreza. Pero recuerden que la comunicación es vital. Todos deben estar pendientes de las tareas que los demás llevan a cabo para apoyarlos cuando sea necesario. Es probable que, mientras armas, por ejemplo, el cielo, te encuentres la pieza de un árbol. Así, no dejes que se pierda y dásela a quien sea el encargado de armar la vegetación.
Para hacer más sencillo el proceso de separación y asociación, un clasificador de piezas es de gran ayuda.
4.- Junten sus secciones.
Una vez que han armado sus partes correspondientes, ayuden a terminar las que hagan falta y, entre todos, coloquen la última pieza. ¡Sabemos que se sentirán satisfechos y felices! Celebren su logro como quieran. Decidan qué harán con el rompecabezas: ¿Lo colgarán en la pared o lo desarmarán para volver a hacerlo en otra ocasión?
5.- ¿Y luego?
Armar un rompecabezas puede llegar a ser una de las sensaciones más satisfactorias de todas, pero también puede generar un entusiasmo todavía más grande. Si necesitas parar y guardar tu rompecabezas tal como lo dejaste, el porta rompecabezas de 300 a 1500 o de 1000 a 3000 piezas es esencial. Es probable que, tras finalizar, se queden con ganas de más. La próxima vez podrían intentar con uno de 1000 piezas y, paulatinamente, aumentar la dificultad de sus desafíos. Pregúntense: ¿Podríamos armar un rompecabezas de 5000 piezas en un solo fin de semana? En la Casa de la Educadora tenemos de 500, 1000, 1500, 2000, 3000, 5000, 9000, 18000 ¡y hasta 42,320 piezas! Ustedes elijan. Armar rompecabezas es una actividad que fomenta la unión familiar y crea vínculos estrechos entre todos los miembros.